botones

viernes, 30 de enero de 2015

"Maeich muchik, chipan siameiñ": SOMOS MOCHES Y SEGUIMOS VIVOS...NUESTRA IDENTIDAD EN LOS APELLIDOS MOCHE, TODAVÍA VIGENTES.

El 65 % de los apellidos de nuestra región serían de procedencia Muchik , además de muchos vocablos que se usan actualmente, como son : loche, mote, mate, cascafe, chope, macanche, choloque, chisco, chillala. El mochica, yunga o yunka (muchik) fue una de las tantas lenguas que se hablaban en la costa y parte de la sierra norte del Perú, habiendo sido una de las lenguas generales del país a la llegada de los españoles (siglo XVI) como lo fueron también el quechua, el aimara, el quingnam, el uru y el puquina.

Recientemente en el Boletín Informativo y Cultural “EL COLIBRÏ” cuyo Director es nuestro coterráneo investigador Alfonso Samamé Rodriguez; se ha publicado un artículo que señala lo concerniente a los apellidos muchik y los más antiguos de la provincia de Ferreñafe…señala dicho medio escrito lo siguiente:

“En la actualidad existen en Ferreñafe apellidos pertenecientes a la lengua muchik.Pero debido a la falta de fuente documentales no se puede probar su existencia en documentos del siglo XVI. Relacionando los apellidos con la cultura muchik , estos tienen una antigüedad de más de 1000 años (tendiendo en cuenta como referencia la genealogía dinástica Naylamp).

Entre los apellidos más antiguos y que se encuentran registrados en los documentos del siglo XVII y XVIII en el archivo de la iglesia de Ferreñafe tenemos: Cusquen, Cus cus, Cuculí, Chanamé, Chepe, Chumán Chisco, Chimpen, Chunga, Farro, Julca, Lampufé (Yampufé), Musayón, Niquen, Nerio, Cipión, Temoche.

Un aspecto muy importante para el estudio de la genealogía es el fenómeno de las migraciones sean estos internos o externos, los cuales se han dado en las diversas épocas de nuestra historia. Por lo tanto los siguientes apellidos michik, es muy probable que hayan llegado a Ferreñafe a fines del siglo XIX o inicios del siglo XX y son los siguientes: Capuñay,Chavesta, Chafío, Chicoma, Chamaya, Chapilliquén, Chero, Eneque, Efio, Jurupe, Macalopú, Ulfe,Urpeque, Nanfuñay,Siesquen, Serqén, Siadén, Sirlopú, Seclén ,Sencie, Supo, Suy Suy, Serrepe, Suyón, Pacherres, Perleche, Piscoya, Paiva,Poemape,Rumiche, Urcia,Quepuy, Yesquem,Ipanaqué.”

Moisés Aylas Ortiz en su artículo “Una identidad revalorada: Yo soy moche” señala lo siguiente “El saber moche estuvo presente siempre en los lambayecanos, particularmente en sus artesanos, en sus tejedoras, pescadores que salen a la mar en sus caballitos de totora, en sus agricultores que conservaban productos nativos, pero lo que faltaba era esa valoración, ese reconocimiento que los hiciera sentirse herederos de una gran civilización como ha quedado demostrado… Un estudio de ADN obtenido en 2009 por el Proyecto Arqueológico Sicán, revela que Lambayeque es étnica y culturalmente el más muchik o Mochica del Perú. La investigación se realizó con los pobladores autóctonos de la cuenca del valle de La Leche (antiguo Lercanlech o Lalech). Se comprobó que genéticamente los lambayecanos de apellido Muchik, como Chapoñán, Llauce, Puémape, Ñamfuñay, Siesquén, Cajusol, Llontop, Farroñam, entre otros, son directos descendientes de los moches, civilización que alcanzó un alto grado de desarrollo gracias a una agricultura diversificada y extensa, minería, metalurgia y orfebrería, así como contactos comerciales a largas distancias marítimas.”

La Lengua y los ancestros muchik representan la identidad de Lambayeque aquella sangre y aquella cultura que hoy se trata de reconstruir y que nuestras escuelas deben revalorar y efectivizar significativamente.

Juan Alex Ipanaqué Dávila en su artículo “Muchik es una lengua que existe” nos dice “El origen de la lengua Muchik es aún muy incierto. Hay quienes sostienen que fue un idioma autónomo, otro que podría ser un idioma extranjero con influencia maya, aunque esta última tesis es muy remota. También es importante señalar que los investigadores como Jorge Zevallos Quillones, Ernst Wmiddendorf o Josefina Ramos Cox sostienen que lenguas como el Quinghan en Eten, (en el norte de Lambayeque) y Sechura (Piura), fueron dialectos propios del Muchik, con características distintas pues el espacio donde se desarrollaron eran variados en su relación directa con su ecosistema… Ana Ramos Cabrera, investigadora de la lengua Muchik, al igual que Guillermo Figueroa (Investigador e Historiador) y la Profesora de Historia Ninfa Idrogo Cubas, coinciden que el Muchik es una lengua que desapareció a mediados del siglo XX, debido al dominio del castellano, al miedo y la vergüenza que tenían los jóvenes al hablarlo, pues les ocasionaría la represión y la marginación en sus pueblos.”


DERECHOS RESERVADOS.